Para el desfile de la temporada primavera/verano de 2019, AMO escenifica un regreso a lo básico mediante una organización sofisticada que sitúa a la moda en primer plano, cuestionando las prácticas recientes que muestran los decorados como intentos de contextualizar las colecciones.

La imperfección natural del espacio ubicado en Via Fogazzaro (Milán) se equilibra con la precisión cartesiana del decorado, que magnifica la elegancia industrial del lugar. El espacio se trata como un campo arquitectónico que controla la dinámica del desfile: una cuadrícula define las zonas para los invitados, mientras que cuatro trayectorias distintas quedan reservadas para que los modelos crucen el espacio de forma longitudinal, resaltando así un diseño estrictamente lineal.

Un diseño geométrico invade el espacio, una manifestación de los principios que organizan la coreografía del desfile. Números y símbolos marcan la ubicación exacta de los actores, y hacen referencia a coordenadas geográficas de lugares remotos.

Para completar el decorado, se escogieron taburetes hinchables creados por Verner Panton (una reedición exclusiva de su creación de los años 60, producida por VERPAN para PRADA), por su ligereza, transparencia y encanto contemporáneo. Todo el espacio está cubierto por láminas translúcidas con el objetivo de recrear una instalación que desaparece en la penumbra de extrañas fuentes de luz, lo que le aporta al lugar una atmósfera psicodélica e insólita al mismo tiempo.

Credit: AMO