Las prendas individuales, a menudo clásicas por sí solas, pueden tener un impacto diferente si se juntan en combinaciones inusuales. Las inspiraciones son maleables y elásticas: los pantalones cortos de piel y los estampados de cuadros pueden evocar simultáneamente recuerdos de la infancia o ideas relacionadas con la domesticación o la sofisticación.
Las siluetas se acercan al cuerpo, las proporciones se abrevian. Evocan juventud y, por lo tanto, energía y vitalidad. La ropa que permite que el cuerpo se mueva libremente transmite frescura y ligereza, una conciencia de su forma y dinámica, una libertad y una alegría innatas.
La reducción da como resultado la optimización: los detalles superfluos se eliminan, como los cuellos de camisas y abrigos. Los pantalones se reducen, se cortan por el tobillo o se convierten en pantalones cortos. La conclusión lógica de este sistema de refinamiento es una secuencia de trajes negros a medida. Eliminar elementos con decisión supone un alivio físico y emocional, una frescura, una ligereza.