La singularidad de Prada reside en su pluralidad y en su naturaleza versátil, que rehúyen las definiciones únicas y las hipótesis evidentes. Las palabras tienen un poder que nos ayuda a destacar esa idea de descontextualizar y reformular percepciones con el fin de transformar nuestra mirada y nuestra mente.
Un reflejo de esta identidad polifacética es el concepto de acrónimo (una palabra compuesta de otras, empapada de un significado colectivo). Paradójicamente sencillo, pero complejo.
Como respuesta a la campaña Primavera/Verano 2020, Prada pidió a sus seguidores que mandasen sus propios acrónimos a través de prada.com, con varias definiciones individuales de Prada; diferentes puntos de vista, emotivos o incisivos, surrealistas o pragmáticos, pero, todos ellos, parte de un mismo todo.
Tan diversas como divergentes, estas definiciones han sido recopiladas para ofrecer un panorama de interpretación más amplio; una percepción externa del significado de Prada. Como las palabras que componen un acrónimo, la variedad tiene un significado.
Compuestos por un sinnúmero de palabras con múltiples significados, estos acrónimos de Prada contrastan, convergen y se contradicen ellos mismos y con los demás. Aun así, existe un nexo de unión entre ellos: cada una de estas palabras se suma a un intento imposible de definir otra… Prada.